7 ideas para que tu dormitorio sea más acogedor

José Manuel Peñalver Romero José Manuel Peñalver Romero
Moradia Estoril/Estoril Residence, 3L, Arquitectura e Remodelação de Interiores, Lda 3L, Arquitectura e Remodelação de Interiores, Lda Dormitorios de estilo moderno
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El dormitorio es el área más privada de tu casa, está hecho sólo para ti y tu pareja, por ello debe estar decorado de manera que sientas especialmente la comodidad y el confort. Tu habitación no solamente refleja una parte importante de ti, sino que también puede influir en cómo te sientes desde que te despiertas. Si es un lugar cálido y acogedor, rara vez sentirás incomodidad o malestar. Es más, será imposible que empieces el día con mal ánimo. Hoy vamos a enseñarte unas cuantas ideas para que tu dormitorio tenga esa energía especial que tanto necesitas. Síguenos en homify en una estupenda visita por los dormitorios más acogedores.

1. La cama y el colchón, lo más cómodos posible

Un tercio de nuestra vida transcurre en la cama y la calidad del descanso influye directamente en nuestra salud. Presta atención a estos 6 consejos para que la elección de tu cama sea un acierto. 

1. No escatimes en la compra de un buen colchón, una buena base y una buena almohada. Recuerda que el colchón conviene cambiarlo cada 10 años. Ten en cuenta la elasticidad puntual del colchón: la base debe ceder sin excesos bajo las partes con más peso del cuerpo (hombros y pelvis), ofreciendo a la vez un soporte firme para las zonas menos pesadas. 

2. Un colchón nuevo sobre una base vieja o de mala calidad se estropea antes, lo más recomendable es renovar el equipo de descanso al completo. Un buen colchón es el que presta apoyo a toda la columna cuando se está acostado boca arriba. 

3. El grosor ideal del colchón es de 15 centímetros como mínimo; el largo, 10 centímetros más que la altura de quien dormirá en él y la anchura mínima recomendada, 80 centímetros para una cama individual y 135 centímetros para una doble. 

4. La base o canapé debe ser firme y uniforme. Opta por una de láminas rígidas o semirrígidas, con espacios libres que permitan una buena ventilación. 

5. La almohada debe adaptarse al volumen de nuestra cabeza, la longitud del cuello y la anchura de los hombros. 

6. Si duermes habitualmente boca arriba, la almohada debe ser baja y blanda, para asegurar que la columna cervical forme con la columna dorsal el mismo ángulo que al estar de pie. Si la postura preferida para dormir es de costado, la almohada debe ser alta y dura, para mantener el cuello en el eje de la columna dorsal asegurándose que no caiga ni rote. El relleno no debe ser ni demasiado blando ni excesivamente duro; debe tener la firmeza necesaria para evitar que la cabeza caiga hacia atrás.

En cualquier caso, compara los años de garantía que ofrece cada fabricante. Ten en cuenta que se trata de un gasto importante y de un artículo que debe durar al menos una década.

2. Combina almohadas y cojines

Pocas cosas resultan tan atractivas en un dormitorio que una cama bien hecha con textiles agradables al tacto y tonos cálidos y acogedores. La ropa de cama no tiene por qué limitarse sólo a sábanas y edredones, que por supuesto son fundamentales, también otros complementos como los cojines pueden ser muy decorativos por su variedad de formas, texturas y colores y aportar comodidad. Respecto a las almohadas, al igual que sucedía con el colchón, también hay que hacer una elección adecuada; es donde reposa la cabeza y su forma debe adaptarse perfectamente a la estructura del cuello y las cervicales para facilitar un descanso saludable y sin complicaciones. Hay almohadas anatómicas de materiales sintéticos y viscolásticos, en muchos tamaños y formas. Es cuestión de elegir la adecuada.

3. Elige una iluminación sorprendente

A la hora de iluminar el dormitorio deberemos tener en cuenta que se necesitarán diferentes tipos de iluminación para cada zona o momento. Estas son tus posibilidades:

- Iluminación de techo o general. Es la iluminación que logra que la habitación  quede iluminada de manera homogénea. Para este tipo de iluminación se utilizan lámparas de techo, focos empotrados o apliques de pared que estén dirigidos al techo.

- Iluminación de lectura o ambiente. Es la que se encuentra, por lo general, en la zona de las mesitas. Es una iluminación directa pero suave ya que no deberá cansar nunca la vista. 

- Iluminación especial concreta. Va dirigida a un punto o elemento concreto que queremos destacar por alguna razón. Los casos más habituales son luces para iluminar cuadros y una zona concreta del dormitorio o el vestidor.

4. En la decoración de las paredes te la juegas

A la hora de decorar las paredes del dormitorio, el primer elemento decorativo es la propia pared; nos referimos a su revestimiento. Puedes elegir entre materiales como la piedra o el microcemento, decantarte por la amplia variedad de pinturas decorativas existentes o incluso el papel pintado. Y sobre cualquiera de estas opciones, seguidamente añadir cuadros, fotografías u otros elementos decorativos. Eso sí, vigilando no saturar demasiado el espacio pues al fin y al cabo es el dormitorio, donde todo debe respirar serenidad e invitar al descanso.

5. La elección de las cortinas

Las cortinas son elementos muy prácticos que además de proteger el dormitorio de la luz natural tienen una función decorativa muy particular. Escoger las cortinas más favorecedoras puede resultarnos algo complicado si no tomamos en cuenta una serie de factores que serán determinantes:

- El estilo decorativo de la habitación es primordial. Buscamos complementar o hacer juego con la ropa de cama y otros muebles o textiles. 

- En el caso de que quieras dar protagonismo a la cortina, entonces debes elegir una que sea estampada o en colores vivos e intensos.

- El tamaño de la habitación también es algo que debes considerar, ya que en habitaciones pequeñas son preferibles aquellas cortinas ligeras en colores claros para que dejen pasar la luz; en cambio, en salas de mayor dimensión puedes decantarte por tejidos opacos si lo prefieres

- Ten presente los cambios de temporada ya que no se requiere el mismo estilo de tejido para invierno que para verano. Normalmente, en los meses de frío se colocan cortinas pesadas y gruesas que mantengan la temperatura interior y eviten pérdidas de calor. En la época estival, son más recurrentes las cortinas livianas, como el visillo, que favorecen la ventilación del hogar

6. Las alfombras

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Levantarse de la cama y pisar una superficie fría no es nada agradable. Sin embargo la sensación de pisar en una alfombra suave y cálida es una buena forma de empezar el día. Con una alfombra no sólo se suaviza el espacio y se le da calidez, también juega un papel importante como aislante acústico, puesto que absorbe buen parte del ruido. Puedes colocar las alfombras a ambos lados de la cama o una grande que cubra toda la superficie de la cama y sus respectivos lados.

7. Muebles que sirvan de complemento

Una posibilidad de hacer más acogedor el dormitorio es a través de los muebles como mesillas, sillones o estanterías. En algunos casos se multiplica la función del dormitorio y se crea una zona de lectura para desconectar un rato antes de meterse en la cama. 

¿Te gustaría ver otras consejos para mejorar tu dormitorio? Entra en Ideas para nuestro dormitorio.

Vamos a la cama, que hay que descansar, y si el dormitorio es bonito, mejor que mejor.

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