Zonas de estudio en habitaciones infantiles

María Bausán María Bausán
El continente y el contenido, Coblonal Arquitectura Coblonal Arquitectura Dormitorios infantiles de estilo escandinavo
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Los niños crecen y la zona de juegos debe convertirse en un espacio para estudiar y hacer los deberes. Pero, ¿cómo debemos organizar ese espacio? En homify hemos seleccionado seis cuartos infantiles con sus respectivas zonas de estudio que nos pueden servir de ejemplo e inspiración a la hora de adaptar la habitación de los niños a esta nueva etapa de su crecimiento. 

Combinar espacios

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Los cuartos de estudio de los niños suelen coincidir con su dormitorio, por lo que es importante crear espacios que inviten al descanso, pero que también motiven al estudio. Por eso, uno una buena opción es utilizar el blanco. Según el Feng Shui, el blanco aporta armonía y tranquilidad. Además es luminoso y la luz es fundamental a la hora de ponerse a estudiar. En el cuarto que vemos en la fotografía, el blanco es el color predominante, aunque también se juega con el beige, un color que ayuda a tener un mejor descanso. 

Aprovechando la luz natural

El mejor lugar para colocar una mesa es en la pared de la ventana. Esta nos asegura que aprovechamos bien la luz natural. Además y, dado que es el muro en el que suele colocarse el radiador, es una buena manera de esconderlo visualmente. 

No obstante, hay que tener en cuenta el tipo de ventana con el que contamos antes de colocar la mesa ahí. Si es una ventana abatible puede resultar incómoda para abrir o arrastrar lo que haya debajo. En estos casos, lo mejor es contar con ventanas correderas. 

Cara a la pared

No todas las opciones pasan por colocar la mesa frente a la ventana. Si la luz natural viene de un lateral es importante tener en cuenta si nuestro hijo es zurdo o diestro. En el primer caso, lo mejor es que la luz venga de su lado derecho, para que no le haga sombra al escribir, y viceversa en el caso de que sea diestro. Independientemente de por qué lado venga la luz, una mesa cara a la pared tiene la gran ventaja de impedir que nuestros hijos se queden embobados mirando la ventana. Una mesa pegada a la pared invita al estudio. En este caso, la mesa está integrada en un  mueble de madera con aire escandinavo que incluye estantería y cajonera, y al que acompaña una silla también de estilo nórdico.

Funcionalidad de colores

Este mueble mezcla funcionalidad y creatividad a partes iguales. Con un diseño divertido, donde destaca por encima de todo el color, este mueble divide la zona de trabajo con el área de noche. Bajo la cama alta se ha situado un amplio escritorio ideal para que los niños puedan realizar las tareas de colegio. Sobre la encimera se ha colocado una estantería y la estructura de madera con que se cubre la pared les permitirá pegar todo lo que quieran sin estropear los muros.

Aprovechando el espacio

El hueco de la escalera que sube a la zona donde está ubicada la cama se ha aprovechado aquí para colocar la zona de estudio de los niños. En la pared donde se apoya la mesa hay estantería repletas de libros y un espacio vacío que puede utilizarse para colgar dibujos y creaciones de los niños. Colgar sus dibujos demuestra que para ti son importantes y a los pequeños les resulta muy estimulante y motivador. 

Cada uno su hueco

Pasada una cierta edad, los niños que comparten cuarto quieren diferenciarse y marcar sus respectivos espacios. A la hora de crear una zona de estudio, y si no contamos con demasiado espacio, siempre es posible utilizar la cajonera como separador en una mesa larga. Aquí además han utilizado sendas cartulinas de colores diferentes a modo de corcho para que cada uno pueda poner lo que más le interesa. 

Si quieres leer más sobre habitaciones compartidas, échale un vistazo a este libro de ideas.

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