Una vez que decidimos iniciar la construcción de nuestra nueva casa, lo que más nos inquieta es el que nos pasemos con el presupuesto y que acabemos no pudiendo hacer frente a gastos imprevistos. También corremos el riesgo de dejarnos tentar por cambios no previstos en el presupuesto, de tal forma que aceptemos esos cambios por el hecho de estar en obra, sin sopesar que ese cambio implicará un incremento del presupuesto. En este artículo vamos a ver 7 consejos para ayudarte a ahorrar en la construcción de tu casa. Este dinero ahorrado te vendrá muy bien para pagar la mudanza o para hacer todas las conexiones con las distintas compañías de electricidad, agua y telefonía.
Al elegir los materiales tienes que tener en cuenta que hay mucha diferencia de precio entre calidades. Esto se ve muy claro en las maderas, mármoles, granitos y muchos más revestimientos. Lo más conveniente es elegir materiales de la zona, para evitar que el coste del transporte incremente el precio del material. Esta solución ayuda a economizar por un lado y por otro lado ayuda a contaminar menos al eliminar el transporte.
Si el solar donde vas a hacer la construcción de tu casa tiene un gran desnivel, es conveniente que adaptes el proyecto a ese desnivel, de esta forma te ahorrarás la excavación de tierras y el transporte de las mismas a vertedero, lo cual representa un gasto que de esta forma eliminas. En el solar debes de acotar una zona para acopiar los materiales que compres en grandes cantidades, esto te permitirá conseguir buenos descuentos.
El proyecto debes de encargárselo a un buen arquitecto, esto ayudará a optimizar la distribución de los espacios, adaptándolo a tus necesidades. Un buen profesional también te mejorará en mucho la idea inicial que tú le vas a trasmitir para cubrir tus necesidades. Siempre tienes que tener presente que los cambios se hacen en la fase de proyecto, nunca una vez que se ha iniciado la construcción, cambiar en obra vale mucho dinero.
Construir tu casa con módulos prefabricados es una buena opción para ahorrar y al mismo tiempo para que tu casa se construya con rapidez. Reduces la mano de obra y los módulos se hacen en fábrica donde el estado del tiempo no frena la actividad. Mientras tanto preparas el terreno para asentar la casa sobre él. Hay diseños con estructura de acero, hormigón o madera y que cubren las necesidades que puedas requerir de espacio, insonorización y aislamiento térmico que nada tienen que envidiar a la construcción tradicional.
Si quieres más inspiración sobre casas prefabricadas no te pierdas este artículo:
Tu propia casa en un abrir y cerrar de ojos – ¡6 casas pequeñas y prefabricadas!
En una construcción tradicional se puede ahorrar si se diseñan forjados de hormigón y pilares metálicos para no tener que esperar al fraguado de los mismos que es de 28 días, de esta forma se termina antes la estructura de la casa. Las instalaciones sanitarias y eléctricas se deben diseñar con los mejores materiales existentes en el mercado. Es bueno que la cocina y los baños estén próximos para ahorrar metros lineales de tubos en las acometidas y desagües y los tabiques interiores hacerlos de cartón yeso tipo pladur que economiza su ejecución.
Actualmente en los acabados se pueden emplear materiales que te ayudarán a ahorrar, como el microcemento que se puede usar tanto para el acabado del suelo como para las paredes, tiene una amplia gama de colores y resiste la humedad. Para el suelo y las paredes se pueden utilizar tableros hechos con capas de madera con muy buena presentación y con garantía de durabilidad a buen precio. Investiga los materiales nuevos disponibles en tu zona que te pueden ahorrar mucho dinero.
A la hora de elegir los aparatos sanitarios se puede ahorrar al elegir la marca y el modelo, pero nunca en la calidad del mismo, que debe de ser la mejor de las posibles para asegurarte un buen rendimiento y durabilidad en el tiempo. Los revestimientos, los sanitarios, los focos de iluminación, todo tiene un mayor precio en función de estar de moda, por lo que debes elegir materiales de calidad pero que no estén tan de moda para evitar pagar un sobrecoste por ello.