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Todas tienen encanto pero, cada una, distintas funciones. Las buhardillas son los espacios interiores que se encuentran bajo una cubierta inclinada. Se caracterizan por la sensación de acogida y resguardo que transmiten al habitante de éstas, que se siente arropado bajo estos techos. Con la estructura vista, enlucidas en blanco y minimalistas o acabadas en madera: existen miles de posibilidades. A continuación, os presentamos diferentes usos que podemos darles: desde un simple espacio para la meditación hasta un lugar para el aseo de los más pequeños.
Un espacio para la meditación y la tranquilidad nos propone el arquitecto Fabio Barilari para esta buhardilla situada en la localidad de Ripatransone, Italia. Como si de un mordisco se tratase, el hueco abierto en ángulo recto se convierte en el protagonista de la estancia permitiendo entrar dentro del interior de la vivienda. Una alfombra, un sillón y la ventana: lo único imprescindible para habitar este lugar.
Lichters Living concibe este espacio bajo la cubierta inclinada como un gran salón. La estancia se construye en doble altura de manera que el techo inclinada nos abraza sin estrangular el espacio. Sobre acabados blancos y planos destaca la estructura de madera que genera un ritmo y dibuja el espacio mediante las vigas y correas. Una mesa y un sofá, colocados junto a la ventana, visten la sala desnuda.
Correas de madera sobre un techo enlucido de blanco dirigen nuestra mirada a la cumbrera de esta buhardilla, diseño de Quino Prades. Este estudio, dedicado al interiorismo, propone un dormitorio para esta agradable estancia. Acabados en madera y colores claros dan luminosidad al espacio y crean sensación de amplitud. Los muebles, de estilo rústico, generan una atmósfera acogera y cálida para el habitante.
Trabajar en esta buhardilla es posible, gracias al Estudi Agusí Costa. Este estudio, que se asoma al Prepirineo, alberga una gran colección de libros, además de constituir un espacio perfecto para leer, estudiar, pensar o reunirse con amigos. Los materiales muestran sus texturas naturales sin ser enmascarados, lo cual nos ayuda a entender la historia del lugar. El mobiliario empleado, auténticos iconos del diseño industrial, habitan la sala.
Por último, el estudio Interiorismo de Spcios Infantiles propone un diseño muy original que aprovecha muy bien el espacio. Este lugar abuhardillado se convierte en un baño infantil separado de la habitación por una mampara de vidrio. Colores crema invaden este espacio para el aseo de los más pequeños.
