Existen en la madera tres propiedades que son difíciles de conseguir en algún otro elemento: color, calidad y textura. A lo largo de los siglos, las propiedades estructurales y las cualidades estéticas únicas de la madera han asegurado su uso continuo en muchos ámbitos, con un sinfín de nuevas técnicas así como diseños y acabados innovadores aún por explorar. Sin contar también la importancia de la madera como ayuda al desarrollo de la humanidad, desde tiempos remotos como materia inflamable para dar calor, para aislar y para cubrir.
Entre sus ventajas más significativas está la relación peso/resistencia, el excelente comportamiento térmico para el frío y el calor, además de ser un elemento atemporal en cuanto a diseño de interiores se trata.
¿No es lo más cool este piso de madera pálida en contraste con la mesa un poco más oscura?
Porque además está muy en tendencia la incorporación de muebles viejos con toques modernos, con puntos de color llamativos fungiendo como centro focal del espacio. Este salón está repleto de buenas ideas, desde el urbano neón hasta los rombos vintage de la alfombra.
La madera bien trabajada en espacios internos bien logrados nunca es mala idea.
Si se busca una habitación más conservadora también la madera en su color más rústico funciona muy bien. La madera tiene un espectro impresionante en cuanto a color y a costos. La madera no es ostentosa, no caduca, no pasa de moda y no cansa a quién la mira.
Para exteriores la madera de teca funciona excelente. Desde hace miles de años es empleada en muelles y lugares cercanos al agua.
La madera tiene un enemigo irrefutable que es la humedad en exceso, pero para baños y cocinas se pueden emplear maderas de mayor dureza y calidad que permita resistir un mayor contacto con el agua.
La integración del suelo como elemento unificador de la sala y la cocina lo es todo en esta imagen. Entender el espacio como uno solo por el pavimento que se aplica es un artilugio utilizado por todos los que usamos la estética como forma de vida.
La madera también se puede utilizar para el recubrimiento de paredes, sean de fachada o interiores, porque además de todas las bondades que tiene, es regularizadora de la humedad interior de un espacio, absorbiendo o cediendo hasta llegar a un equilibrio.
Para completar, la madera se puede laquear, pintar, forrar, aglomerar, y es más plástica que las plastilina.
Con las nuevas tecnologías de corte láser se pueden exportar los archivos de programas de diseño digital directo a la máquina de corte, ejecutando piezas listas para armar.
¿preocupado porque la madera no puede ser segura? aquí está siendo aplicada como revestimiento de una puerta de estacionamiento y como puerta principal de una vivienda unifamiliar.
Quizás para exteriores se tiene que aplicar algún tratamiento periódico para que no pierda su aspecto saludable
después de mucho tiempo recibiendo los rayos del sol, pero bueno… ¡algún defecto tenía que tener!
Sí, yo amo la madera.