Esta reforma de un apartamento muy comprimido necesitaba incluir dos dormitorios en su interior, esta condición se convritió en el principal argumento de esta reforma de 40m2 en el barrio de El Arenal en Sevilla.
Para resolver las necesidades, se plantea la colocación de un tabique móvil curvo, a partir del cual ser capaz de transformar el espacio para cerrar la habitación o unirla al espacio principal dependiendo de cada momento. El hecho de que el tabique sea curvo otorga serenidad y continuidad a la vez que amplía el espacio de la entrada y la cocina mientras se encuentra cerrado. La vivienda se completa con un mueble longuitudinal que une salón con la cocina y los espacios privados a la vez que alberga el almacenamiento general de la vivienda; en todo el mueble se coloca la televisión y aparatos electrónicos, todo el almacenamiento y electrodomésticos de la cocina, y por último la zona para el almacenaje de ropa y otros utensilios. El espacio de acceso a la zona de noche se forró en madera lacada en blanco y se integraron las puertas del dormitorio y el baño, quedando enrasadas. La iluminación indirecta del mueble en la zona de la cocina baña el espacio central del mueble, sirviendo de decoración y luz de ambiente mientras ésta no se está utilizando.