Se dispuso de una pérgola frente a la fachada norte con celosías inclinadas según el ángulo menor del sol en invierno, cuando las sombras son más largas. De esta forma se permite que el sol pase entre las celosías en invierno cuando la energía solar es apreciada y restringe su llegada hasta los muros en verano cuando su aporte energético es excesivo.