La cuna Growing es muy especial pues crece a la vez que lo hace el
niño que la disfruta. Dispone de dos alturas para el colchón, de esta
forma cuando es un bebé tiene doble acolchado y está más alto para que
los papas lo puedan coger cómodamente. Cuando el niño ya se pone de pie
el colchón se baja, evitando que pueda saltar y caerse.
Una vez que ya duerme en su camita la cuna Growing se convierte en un comodo sofá para el más pequeño, así puede disfrutar en el de sus momentos de ocio. Y cuando el niño ya no puede utilizarlo como sofá se convierte en un baúl en el que guardar sus juguetes para que todo su cuarto esté en orden. Sin duda, la cuna Growing es un elemento que alarga su vida útil.